Esta práctica también conocida como mirar a las musarañas es la más habitual.
A uno se le nublan los sentidos, primero el oído y luego la vista. TODO desaparece y nos transportamos a un mundo mejor en el que no estamos en clase.
Es algo bastante cómodo excepto cuando vuelves a conectar y te das cuenta de que:
a) Solo han pasado 2 minutos.
b) Te ha preguntado el profe/profa y toda la clase espera en silencio a que respondas la pregunta que no has oído.
c) Tu profe/profa se acaba de parar delante de ti esperando a que reacciones.
Nosotras os recomendamos:
Para el caso A: vuelve a evadirte hasta que termine la hora o llegues a las situaciones B o C
Para el caso B: tienes varias opciones. 1- Ser sincero. 2 - Responder lo primero que se te pase por la mente. 3 - Mirar a tu compañero para que te ayude. 4 - Decir que te ha impactado tanto lo ultimo que escuchaste que has estado meditándolo.
Para el caso C: Pon cara de arrepentimiento, di que lo sientes y que no volverá a pasar. Deja que pase un poco de tiempo y vuelve a tu mundo.
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